El modelo en el que se basa ClimateOS está diseñado para preservar las actividades que tienen lugar en una ciudad o región, como, por ejemplo:
- el transporte de personas y mercancías;
- la calefacción y el enfriamiento de los edificios;
- la construcción;
- la agricultura;
- la producción de bienes.
Lo que busca este modelo es cambiar el impacto de las operaciones necesarias para llevar a cabo estas actividades para que generen menos emisiones de carbono. Por eso, el modelo sugiere otras oportunidades de satisfacer las necesidades de las actividades sin renunciar a la función que cumplen.
Para calcular y visualizar estos cambios, utilizamos elementos de transición que se basan en cadenas causales del carbono. Estas cadenas explican la relación entre el uso de una operación determinada para realizar una actividad y la cantidad de emisiones que se generan.
¿En qué consisten los elementos de transición?
- Son palancas universales; es decir, los elementos de transición necesarios para cada ciudad pueden activarse de forma modular.
- Están basados en un modelo matemático que hace posible calcular la reducción de carbono y otros indicadores primarios.
- Permiten conectar estrategias y medidas al cambio que se ha creado.
- Están interconectados, es decir, un elemento de transición afecta a otros elementos de transición y viceversa (por ejemplo, instalar una bomba de calor es algo que normalmente se hace paralelamente a la retroadaptación de un edificio).
Puedes explorar los distintos elementos de transición aquí.
Los tipos de cambios que estos elementos de transición describen generalmente pueden dividirse en cuatro categorías:
- Cambio del mecanismo de operación (ejemplo: sustituir los vehículos de motor de combustión interna por el transporte público)
- Reducción de las operaciones necesarias (ejemplo: más teletrabajo)
- Aumento de la eficiencia (ejemplo: mejor conducción y mejor motor)